Mely Y Fausto, La Historia

el comienzo  |  el compromiso  |  la boda  |  una promesa cumplida  |  la luna de miel  | un nuevo capítulo

POSITIVO: ESTOY EMBARAZADA!

Marzo del 2010. Se acercaba el cumpleaños de Fau y yo andaba ocupada planeando las sorpresas para él. Jamás me imaginé que una muy especial ya venía en camino! Hacía ya varios días que algo andaba mal conmigo: me sentía un poco mareada y mi estado de ánimo no era el mismo de siempre. Incluso en una ocasión en que discutí con Fau me pregunto que qué me pasaba pues teníamos muchísimo tiempo de no enojarnos, y entre molesta y bromeando le conteste: “Pues capaz que estoy embarazada”. Los dos sonreímos y contestamos: “Ay claro que no!”. La verdad es que, dentro de mí sentía que algo estaba sucediendo, estaba algo preocupada porque tenía unos días de retraso así que decidí hacerme una prueba de embarazo solo para descartar la posibilidad y ya estar tranquila. Fui a la farmacia a comprar una, llegue a la casa la abri desesperada y se me cayo al piso varias veces de lo nerviosa que estaba. Y después de unas 2 botellas de agua, me la hice. Recuerdo cerrar los ojos y tapar el resultado y antes de destaparlo dije: “Señor, tu conoces nuestros planes, pero nosotros no conocemos los tuyos, que sea lo que Tú quieras”. Destape la prueba y no podía creer lo que estaba viendo: OTRA RAYITA COLOREADA. ERA POSITIVO!

 En ese momento me quede inmóvil y aun sentada en la taza comencé a llorar. Eran muchos sentimientos juntos y muchas preguntas saltaron a mi mente. Estaba en shock! En mi incredulidad, corrí de nuevo a la farmacia por otra prueba y algo hice mal que no funciono correctamente y no pude saber bien el resultado y pensé: “Tal vez era una falsa alarma y no estoy embarazada!”. Mi única opción: la prueba de sangre. Corri al laboratorio y  llegue muy nerviosa, al fin iba a saber si esto era verdad o no. Saque las dos pruebas de embarazo y escondiéndolas para que nadie más las viera (como si fuera una adolecente ocultándolo jaja), se las enseñe  a la chica que me atendió  y le dije: “Qué tan seguras son estas cosas?”. Las vio y sonriendo me dijo: “Bastante seguras”. Dios mio! Yo seguía pensando que las pruebas y la chica se estaban equivocando porque yo no podía estar embarazada! Habíamos sido muy cuidadosos y aun no estaba en los planes, al menos no en los nuestros, pero no contábamos con que Dios tenía otros muy distintos. Me hicieron la prueba de sangre y me dijeron que en la noche podía checar el resultado por internet. Fueron las horas más largas de mi vida.

Fausto me estuvo llamando esa tarde para saludarme, como siempre. Ese día por algún motivo no fue a comer y qué bueno porque sé que se hubiera dado cuenta de que algo estaba pasando. Todas las veces que llamó yo trate de sonar lo más normal posible, no quería que sospechara nada para poder sorprenderlo más tarde que supiera con seguridad si estaba embarazada. Y aunque mi mente aun no lo procesaba bien, quería darle la noticia de una manera especial. En varias ocasiones me pregunto que si me pasaba algo, que sonaba rara, fue muy difícil despistarlo porque me conoce tan bien. Llegaron las 7pm y mis resultados ya debían de estar en internet. Abrí mi laptop, entré a la página del Laboratorio e ingrese mi nombre junto con la clave que me dieron. Algunos eternos segundos pasaron y unos puntos suspensivos aparecieron……………………… y aun lado: P O S I T I V O. Mis ojos se clavaron en la pantalla y lo leí una y otra vez para asegurarme de que había leído bien y sí, decía POSITIVO. POSITIVO! ESTOY EMBARAZADA! VOY A TENER UN BEBE!! VAMOS A TENER UN BEBE!!!!! Muchas cosas pasaron por mi mente: Qué va a pasar ahora? No sé si estoy lista para ser mamá! Que le voy a decir a Fau? Y ahora todo va a cambiar?! Trate de controlarme porque sabía que él no tardaba en llegar y aunque no había tenido tiempo siquiera de pensar como le daría la sorpresa cuando “algún día me embarazara”, quería hacer algo que recordara toda la vida.

LA NOTICIA

Fausto llego a la casa y teníamos un evento del Club al que teníamos que asistir, así que me aliste agarre mi cámara de video, la escondí en mi bolsa y nos fuimos. Todo el camino iba seria y pensativa, no podía creer que esto estaba pasando! Fue tan repentino! De un día para otro me entere que vamos a ser papás! Mi mente iba a mil por hora. Fau me tomaba la mano y me preguntaba que si me sentía bien y solo le contestaba que estaba algo cansada, pero era todo. Dentro de mi pensaba: “Después de algunas horas, ya todo será diferente!”. Y aunque era un sentimiento de emoción, también me sentía asustada de lo que estaba por venir. Se que tengo a un hombre que me ama por sobre todas las cosas, pero precisamente tenía miedo que eso cambiara y que ya dejáramos de ser solo él y yo.

Durante todo el evento trate de actuar normal, salude a todo mundo muy sonriente y cuando estábamos sentados en las mesitas, llego el mesero y nos ofreció unas bebidas y yo solo conteste: “Para mí, agua porfavor”. Fausto se sorprendió un poco porque sabe que si hay piñas coladas, nunca me resisto! Entre el nervio de toda la situación y los síntomas del embarazo, comencé a sentirme mareada y le dije a Fau que si nos podíamos ir temprano y me dijo que claro que sí. Ya en el carro le dije que como su cumpleaños iba a ser en dos días más (no me pude aguantar!), le tenía preparada desde hoy una sorpresa y que teníamos que hacer una parada antes de llegar a la casa porque ahí le iba a entregar un regalo. Y tan lindo como siempre es, me siguió la corriente.

Llegamos a “nuestro parquecito” y nos bajamos. Caminamos hasta un lugarcito y le pedí que se sentara en el pasto. El me miraba fijamente como tratando de analizarme pero no podía entender lo que estaba pasando. Saque la cámara de video y le dije que quería grabar ese momento porque desde hoy íbamos a comenzar a festejar su cumpleaños y así quedaría todo guardado para el recuerdo. Me senté frente a él y pensé: “Este es el momento Mely, ya no hay vuelta atrás”. Y le dije: “Mi Amor, escogí este parquecito porque aquí hace ya 8 años me diste mi primer beso y en un parquecito como este hace 4 años me pediste que fuera tu esposa, así que este día y en éste parque quiero darte algo muy especial”. Después de esas palabras note que sus ojos pudieron leer los míos y ahí supe que ésta sería una noticia que aunque no esperaba, lo iba a hacer muy feliz. Saque de mi bolsa un regalo y se lo di. Lo tomo por unos segundos y al abrirlo saco una cajita: La prueba de embarazo. Yo estaba muda. Y me dijo: “Que es esto mi Amor?”… lo repitió una y otra vez: “Qué es esto mi Amor?”.  Saque de la bolsita una hoja y se la entregue. Era la prueba de sangre donde decía POSITIVO (sabía que iba a necesitar algo más que solo la prueba casera para creerme!).

Me miro con esos ojitos sorprendidos y tratando de que no se me cortara la voz le dije: “VAMOS A TENER UN BEBE!!!”. Se acerco hacia mí y me abrazo. Un abrazo que necesite todo el día y tuve que esperar hasta la noche por él. Me dijo: “Felicidades Preciosa, qué bonita noticia me estás dando!”. Y entonces me levante la blusa y en mi panza estaba escrito “HOLA PAPI!”. No puedo explicarles la cara que hizo al verlo. Creo que sintió algo así como cuando él me sorprendió con el anillo de compromiso. Es algo tan bonito poder ahora sorprenderlo a él con la noticia de que va a ser Papá! Es algo indescriptible. Después de muchos abrazos, lágrimas y besos, regresamos a la casa ya no solo dos, sino ahora TRES!

YA ESTABA ESCRITO

Fue una noche larga en que nos quedamos platicando de todo: de nuestra vida, nuestras aventuras, de todo lo que hemos hecho y disfrutado, de nuestros viajes, nuestras fiestas, de cómo hemos tenido la bendición de ser un matrimonio solido y que nos hemos divertido tanto a lo largo de éstos ya casi 3 años de casados. Platicábamos también del gran esfuerzo que hicimos para levantar cada quien sus negocios y tener la libertad de nuestro propio tiempo y de cómo aunque “no lo planeamos” siempre pensamos en hacer eso para cuando llegaran los bebes poder trabajar desde casa y disfrutar de verlos crecer cada instante. Y nos dimos cuenta que ya estaba escrito y que este era el siguiente paso para nosotros (aunque estábamos dándole muchas largas jaja). Y llego la pregunta del millón jaja: “Pero en qué momento pasó esto?!”.

Y al hacer algunos cálculos y checar las semanas que tenia de embarazo nos dimos cuenta que todo apuntaba a nada más y nada menos que: El 14 de Febrero! Los dos nos reímos por un largo rato recordando ese día taaan especial y me dice Fau: “Bueno pues al menos puedes estar segura que ese bebito fue hecho en una fecha muy especial y con muuucho amor!”.

Después de algunas carcajadas y de pasar ahora a lo “serio” del asunto le dije: “Mi amor, te das cuenta que ahora hay un vinculo para siempre entre tú y yo? Ahora va haber una personita que nos va unir por el resto de nuestras vidas y ya nada nos puede separar”. Y lo que él me contesto NUNCA LO VOY A OLVIDAR, me dijo: “Chiquita, eso yo lo supe desde el día que me case contigo. Hay un vinculo muy especial entre nosotros desde mucho antes que llegara este bebe, el solo viene a complementarnos, pero mi corazón te pertenece a tí hace ya mucho tiempo”.

Hoy a casi 4 meses de embarazo que decidimos hacerlo público, estamos emocionados de saber que muchas aventuras nuevas están por venir, una historia nueva comienza a escribirse. Es cierto que muchas cosas van a cambiar, pero cambiarán para mucho mejor! Estamos emocionados de que una nueva personita se unirá a la familia Cruz. Y algo que tendremos siempre presente: “Los planes que Dios tiene para nuestra vida, muchas veces son muy distintos a los que nosotros tenemos pensados para nosotros mismos, pero de lo que podemos estar seguros es que son mil veces mejores”.

MI CORAZON ME LO DIJO: ES NIÑO!

Con muchos nervios y expectativa nos subimos al carro rumbo al Doctor, hoy sería el día en que al fin sabremos que será el bebé. En la última cita no se dejo ver bien, pero estábamos seguros que ésta vez (siendo que está más grande) lo sabríamos! Aunque para ser sinceros, estabamos seguros que sería... Hace unos días por primera vez sentí una patadita! Estaba dormida y escuché el timbre de la casa (o al menos eso pensé) y justo cuando abro los ojos sorprendida de quién podía ser en la madrugada: PUM! Siento una patadita en mi pancita!!! Asombrada y un poco incrédula me puse la mano en el vientre y PUM! Volví a sentirlo!!! Fue una sensación inexplicable, no podía creerlo. Mi bebé me había despertado "con el timbre" solo para decirme "HOLA MAMI!"

Fau estaba tan dormido, que no quise despertarlo, pero a el también le tocaron sus pataditas unos días después. Las siguientes noches estuvieron llenas de "pequeños saluditos" de parte de nuestro bebito y una noche pasó algo muy especial: Soñe que estaba acostada en la cama con el bebito sobre mí, en mi pecho. Se sentía calientito y olía a bebe y estaba abrazándolo. Vi sus ojitos y ahí lo supe: ERA UN NIÑO!! El se sujetaba de mis hombros con sus manitas y entonces le dije: "Mi hijito, aquí estas seguro con Mami, no tienes de qué preocuparte". Bajó sus manitas como rindiéndose y ahí supe que a parte del cariño de incondicional de mi Esposo, siempre me sentiría protegida también por mi hijo y habría un hombre más en la casa que cuidará siempre de mí y yo de él. Cuando desperté, le conté el sueño a Fau y aségurandole le dije: ES NIÑO! Ya lo vi en mi sueño y está precioso!! Fau puso una cara de emoción y me dijo: "Yo también siempre he sentido que es niño". Nuestras sospechas se hicieron realidad cuando el Dr. nos dijo: "No hay duda, éste es un varoncito"!!! Y los dos  nos miramos sonriéndo de cómo nuestro corazón no se equivocó! Ya viene en camino el primogénito, el que continuará con el apellido, el seguidor de Papi y quien junto con él, consentirá mucho a su Mami porque seguirá siendo LA REINA DE LA CASA!

KAEL NACE HOY!

A tan solo horas de convertirnos en papás, y ya con contracciones, me tomé un momentito para sentarme y recordar tantas aventuras que vivimos juntos a lo largo de estos 3 años, 3 meses de casados y le di gracias a Dios porque mi corazón se lleno de felicidad de ver que muchas cosas que nos habíamos propuesto, en distintas maneras, las cumplimos pero lo más importante de todo, que disfrutamos de tantos momentos inolvidables: Celebramos muchas fechas especiales y otras un tanto fuera de lo común y ya tradicionales nuestras como los “1,000 días de casados”. Nos emocionamos también con la llegada del primer miembro a nuestra familia: LUNA. Festejamos cumpleaños con fiestas en grande, otros con cenas románticas y otros con sorpresas inesperadas como la vez que a Fau le dio su regalo “La Mujer Maravilla” (su esposa disfrazada obviamente) y la vez que el llego con mariachi a la ventana de nuestra recámara y me cantó “Mi linda muñequita” (una de mis favoritas en las serenatas de novios). Hicimos viajes románticos, otros divertidos con amigos, otros en carro y otros en avión e incluso viajamos con la familia. Y como olvidar las idas de shopping en que Fau me esperaba afuera del vestidor… me encantaba ver esa mirada que decía “Te ves preciosa” y por eso terminaba comprando toda la tienda!

Festejamos cada aniversario de casados y seguimos recordando los de novios con detalles especiales como cenas especiales  en casa. Hicimos muchas sesiones de fotos, tantas que Fau ya se convirtió también en todo un modelo profesional. No dejamos pasar un solo Thanksgiving sin darle gracias a Dios por la bendición de estar juntos y lo celebramos comiendo pavo y todas las demás tradiciones. Tuvimos noches de películas, otras de carnes asadas, otras de salir a bailar y otras tantas románticas brindando (aunque Fau siempre terminaba con la misma copa y curiosamente solo a mí me daba dolor de cabeza al día siguiente). Tuvimos días de desayunar, comer y cenar juntos y otros también de mucho trabajo en que añorábamos vernos. Tuvimos tardes de caminar en el parque, hacer picnics y volar papalotes. Pusimos tres pinitos de Navidad juntos y todos los años con el mismo cd de villancicos y las velas encendidas con olor a Navidad. Bailamos juntos en tantas bodas y en tantos momentos a solas y él sabía cómo lo disfrutaba porque es el único con el que lo he hecho.

Aprendimos a no darle importancia a las pequeñas diferencias y a darle importancia a lo que nos hace felices. No nos perdimos de nada, disfrutamos de cada momento, desde el más cotidiano como llevarnos el desayuno a la cama, hasta el más especial como pasar nuestro Aniversario en un hotel para recordar la noche de bodas! Este tiempo juntos solo él y yo estuvo llenos de todo y creo que si tuviéramos que vivirlo de nuevo, lo haríamos exactamente igual y sin cambiar nada. Definitivamente nunca olvidaremos la hermosa etapa de “Recién Casados” y la atesoraremos siempre en nuestros corazones. Dos corazones que comenzaron esta historia de amor y ahora se convirtieron en tres. Una personita más está por integrarse a nuestra familia y estamos ansiosos de vivir juntos nuevas aventuras.

Esta historia se sigue escribiendo y el deseo más grande de nuestro corazón es que seas TU Señor quien sujete ese pincel y sigas llenando las páginas de nuestra vida. Nuestro futuro esta donde mejor puede estar: EN TUS MANOS.

LLEGO KAEL AL MUNDO

El 27 de Octubre tenía cita con el Ginecólogo y pensábamos que sería una de las últimas. Ya tenía 38 semanas y estábamos casi seguros que no pasaría de esa semana pero nunca imaginamos que ese mismo día le daríamos la bienvenida a Kael a éste mundo. El Doctor me hizo un registro y noto unas leves contracciones que yo ni sentí y después al hacerme un chequeo inmediatamente me dijo: "Así es, no pasa de esta semana porque HOY mismo te vas al hospital, tienes 2cms. de dilatación y todo se ve muy favorable para que sea parto natural como tu siempre has querido". Emocionada y nerviosa a la vez, sonreí sorprendida y un millón de cosas pasaron por mi cabeza: No podía creer que al fin conocería a la personita que estuvo creciendo dentro de mí todos estos 9 meses!

Fausto y yo llegamos al hospital por ahí de las 4pm e inmediatamente me conectaron para comenzar a checar los latidos del corazoncito y que todo marchara sin problemas. La sala de partos estaba bastante cómoda, había incluso una salita donde mis papás y mi hermano estuvieron echándome porras recién llegamos y ya después esperaron afuera. Las primeras contracciones casi ni las sentía, me paraba a caminar un rato y bromeaba con Fau de lo "sencillo" que todo parecía ser, al menos hasta aquí (no sabía lo que me esperaba). Las horas seguían pasando y las contracciones cada vez eran más y más fuertes. De rato en rato el Dr. entraba a hacerme chequeos y nos iba diciendo cuantos centímetros iba dilatando y cada vez que escuchaba uno o dos más me sentía muy feliz porque significaba que cada vez estaba más cerca el momento de conocer a Kaelito! Al llegar a los 6cms las contracciones ya eran casi insoportables y venían cada minuto por lo que no tenía tiempo de descansar y ni agarrar aire. Realmente era un dolor que jamás había sentido en mi vida, un dolor indescriptible, sin embargo sabía que cada vez estaba más cerca. Fausto estaba al lado de mí, sosteniendo mi mano y contándome la respiración. Entre contracción y contracción acariciaba mi frente, secaba mis lágrimas y me decía lo orgulloso que estaba de mí y que no se iba a separar de mi lado ni un solo segundo, todo el tiempo estuvo ahí animándome a no desistir porque él sabía lo importante que era para mí que fuera un parto natural... realmente quería vivir esa hermosa experiencia.

Después de 6 horas de contracciones y sin una gota de anestesia, pedí la epidural porque sentía que ya no iba a aguantar más el dolor, pero el Dr. me decía que si la aplicaba entonces el parto se podía extender a muchas horas más y como llevaba buen ritmo, nos dijo que sería cuestión minutos... solo tenía que aguantar un poco más. Esas palabras me dieron aliento y enfoqué mi mente en seguir todas las instrucciones del equipo médico. La última hora fue la más difícil pues tenía que pujar en cada contracción y ya con la fuente rota podía sentir cómo el bebito ya estaba casi listo para salir. Mandaron a Fau a cambiarse con la ropa de hospital y ahí supe que ya faltaba muy poquito! Y cuando regresó escuche que el Dr. dijo: "Ya está por salir! Ya te podemos aplicar la anestesia para la expulsión". Ahhh, esas palabras fueron un alivio! Fausto me miró emocionado y me dijo: "Estamos a minutos de conocerlo mi Amor!". Y así fue... puje con todas mis fuerzas por última vez y escuché que el Dr. dijo: "YA NACIO!".

Kael llegó a este mundo ese 27 de Octubre del 2010 a las 11:42pm pesando 3.230kg y midiendo 53cms. Al escuchar ese primer llantito de vida mi corazón se derritió, estaba tan agradecida de que todo hubiera salido bien. Su Papi cortó el cordón umbilical y después de limpiarlo y hacerle un chequeo rápido, el Pediatra lo puso en mis brazos. Ese sentimiento jamás lo olvidaré. Vi su carita de angelito y tomé sus manitas chiquititas y las besé. Le dije que lo amaba y que estaba ansiosa por conocerlo y abrazarlo. Sus ojitos estaban bien abiertos y nos volteaba a ver a mi y luego a su Papá y escuchaba atento lo que le decíamos, era como si reconociera perfectamente nuestras voces. El Dr. nos dejo tenerlo ahí un buen rato y estuvimos platicando con él y llorando juntos agradeciendole a Dios por la bendición de haber llegado hasta aquí. Y justo ahí que estábamos los tres abrazados supe que ahora siempre tendría dos hombres en mi vida, MIS DOS AMORES.

Después de muchas fotos y sonrisas, el orgulloso Papá salió con su hijo en brazos para presentárselo a los abuelitos y aunque era casi media noche, ahí estaban  emocionados por conocerlo!! Un par de horas pasaron en la sala de recuperación en las que Fau y yo no dejamos de sonreír y platicar de lo lindo que era nuestro bebé y de todos los planes que queríamos empezar ahora juntos los tres. Me dijo que se sentía muy orgulloso de mí por haberme aventado el parto sin anestesia y que el sufría de verme sufrir pero que sabía que la recompensa valdría la pena. Le dije que aunque fueron las horas más dolorosas de mí vida, fueron también las más emocionantes, llenas de muchos sentimientos que guardare siempre en mi corazón. Me abrazo, me beso y no dejaba de preguntarme que cómo me sentía. Vi en sus ojos una mirada distinta, como si no cupiera en su corazón tanta felicidad y tanto amor y eso me hizo sentir aun más feliz.

Y aunque nunca te sientes listo para esta nueva etapa, se que esta aventura de "ser papás" será mucho más hermosa y divertida de lo que imaginamos.

... CONTINUARA!