Un Beso
Alguien una vez me dijo, que cuando las palabras no bastan... con un beso, los corazones se entienden. Fue mi esposo. Creo que es por eso que decidí guardar mis labios solo para él. Para un solo hombre, para aquel con quien mi corazón se entendiera. A veces pienso: Porqué las cosas pasaron así? Porqué cuando llego él, llego para quedarse?
Creo que Dios sabía perfectamente lo que yo necesitaba... sabía que no iba poder soportar pasar de unos brazos a otros, dejar entrar a uno, sacarlo, luego dejar entrar a otro... y así sucesivamente. Sabía que yo quería uno solo... y solo a ese lo amaría por siempre, sin corazones rotos, sin lágrimas, sin despedidas, sin etapas difíciles, sin recuerdos tristes. Definitivamente no lo hubiera soportado.
Oportunidades... muchas. Pero fue una desición la que me hizo ESPERAR. Una convicción de que algún día, toda esa larga espera, valdría la pena. Y así lo fue!
Un beso... Insignificante o especial... tú lo decides. Y así, todas las cosas de la vida, solamente nosotros decidimos si van a ser importantes o no para nosotros, si vamos a dejar que se pierda el respeto y que todo se convierta en "equis"... O si vamos a seguir firmes en nuestras convicciones, no importa lo que la demás gente piense porque a final de cuentas, es tu corazón el que salvas o dejas que se eche a perder.
Por eso, has las cosas insignificantes; especiales y así las cosas especiales, nunca llegaran a ser insignificantes.